domingo, 12 de febrero de 2012

Un señor muy alto con unos bigotes enormes (crónica)



A mediados del 2004 Patricia y yo éramos amigos, compañeros, alumnos de la misma facultad y por alguna razón nos enviábamos mails regularmente contándonos nuestras cosas. Mientras que los de ella tenían como subject el típico “hola”, cada uno de los míos tenía nombre propio, o sea un título distinto y significativo, y es que eran correos muy distintos entre sí porque contaban pasajes de mi vida en diferentes épocas. Patricia se limitaba a escribirme sobre su actualidad.
Se supone que todo lo que nos contábamos era verdad… bueno, en mi caso no siempre era así. A veces exageraba los hechos o, cuando la memoria me fallaba, inventaba situaciones que encajaran bien en la historia contada. Todo con un solo propósito: hacer que el mail fuera lo más entretenido posible. En uno en especial mi imaginación se desbordó. Fue aquel donde le conté de cómo dos años atrás había intentado conseguir trabajo como acompañante de mujeres mayores, en otras palabras, como gigoló; hecho que sí ocurrió. En resumen, sólo había sido una conversación de 15 minutos con un señor alto, panzón, y bigotón que casi me convence que podía hacerme rico teniendo sexo con señoras de la alta sociedad limeña; yo había ido a esa entrevista de trabajo por un anuncio, pero al final no pasó nada porque, entre otras cosas, pensé que todo era demasiado bueno como para ser cierto y que podría salir perdiendo. En ese mail inventé mi preocupación por mi nombre de batalla (si es que llegaba a conseguir el trabajo) porque tenía que ser un buen nombre, uno que llamara la atención de posibles clientas, un nombre digno de un semental. Le conté que mi primera opción había sido “Máximo” (por su obvio carácter superlativo) pero que luego lo cambié por “Máximus”, porque esa terminación latina en “us” lo hacía sonar poderoso, como Spartacus (esclavo y luchador romano), Óptimus (líder de los autobots), o Brutus (el rival de Popeye), por citar algunos ejemplos. Pero luego le conté que de repente “Máximus” era tan buen nombre que al final una clienta podría sentirse estafada al ver que tal denominación no iba con mi persona, mucho menos con mis atributos: “mucho nombre para tan poco pene” reclamaría aquella señora, fue lo que escribí en el mail, tal cual y sin eufemismos, porque con Patricia no había temas ni palabras prohibidas. También mentí cuando le conté que al finalizar la conversación con en ese señor rechacé su oferta de trabajo ahí mismo; en realidad pasaron un par de cosas en los siguientes días antes de que tomara una decisión definitiva, cosas que no le conté, principalmente, porque en ese punto el mail ya estaba muy largo.
Bauticé ese correo como (haciendo referencia a mi posible empleador) “Un señor muy alto con unos bigotes enormes”, parafraseando el titulo “Un señor muy viejo con unas alas enormes”, un cuento de García Márquez.
A Patricia le causó mucha gracia: “me cagué de risa” fueron sus palabras exactas, y yo quiero creer que me lo dijo sinceramente.
Aquel correo luego se convertiría en el primer cuento publicado en este blog. Y con ese ya son 30 los cuentos publicados, todos basados en textos escritos entre el 2006 y el 2010. Pues ahora resulta que precisamente ya se me acabaron esos textos base y por eso no me queda otra que empezar a narrar hechos reales, algo así como crónicas, en paralelo, mientras voy desarrollando ideas que he ido acumulando durante el tiempo de vida de este blog. Por cierto, gracias a todos los que me siguen.
Pensando en aquel señor muy alto con bigotes enormes, puse en Google “productor porno Perú” y no solo di con su nombre (no me acordaba de ese dato): Guillermo Cannesa; encontré también este informe del programa “Enemigos Públicos” donde él es el protagonista.
La industria porno en el Perú (sólo para adultos)
***
Nota: si alguien se ha preguntado por qué mi ritmo de publicación ha sido tan irregular en lo que va del año es porque he estado jugando mucho con mi regalo de navidad:

14 comentarios:

  1. Es muy interesante leer los correos que uno le envia a una persona; ¿que hechos cuenta?; ¿cómo los cuenta?,
    allí uno es su propio escritor, editor y personaje.

    Viendo el video comprendo totalmente tu alejamiento (y lo envidio ;-))

    Un abrazo!

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    1. lastima que me olvide la contraseña de ese correo asi que ya se perdieron esos mails. un abrazo igualmente, juan

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  2. Yo me acuerdo de un cuento que tenía un billete como imagen.

    PD. Yo si te contrataba. Imaginate "Maximus... Ooohhhh... Maximussss....haaaa...hoooo...mmmmm.... Maxi Max... Haaa..." no importa el costo. ;)

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  3. Qué mostro que tengas tiempo para jugar!!! Yo suplico por 5 minutos de este desgraciado y no me da ni 2 minutos al día, puedes creer? Ya ni siquiera puedo conversar bien con mi esposo :( llego y me duermo!

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    1. pues la verdad le robo un 'poco' de tiempo a mis horas de sueño jaja, consecuencia: dormir en mi trabajo sobre mi escritorio en la hora de descanso.
      un abrazo, marite

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  4. Hasta hace poco tuve alguien con quién escribir ese tipo de emails, era bien chévere, lo era. Ahora extraño eso.

    "Mucho nombre para tan poco pene" una frase memorable, sin duda xD

    Sigue jugando, pero no nos dejes mucho tiempo sin tus posts, sí?

    Un beso, Maximus :)

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    1. dentro de poco salgo de vacaciones asi que podre balancear mis horas de juego, escritura, y otros placeres.
      besos, patyUS XD

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  5. Estaré atento a tus escritos, como siempre. Siempre son de buena calidad. Por cierto, yo me terminé el Zelda Skyward Sword hace 2 semanas, y a fin de mes le haré su análisis respectivo

    Suerte en el juego ;)

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    1. estare atento a tu reseña, pero por fa, sin 'spoilers' o revelaciones de la trama jejeje
      gracias y saludos, edch

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  6. Yo jugué la de la Ocarina del tiempo en mi compu pero no lo terminé, tremendo pecado! es que en una parte se rayaba, no era un buen emulador...Ah! sobre el cuento, bueno, tus narraciones siempre son muy buenas, estoy seguro que el tiempo como blogger ha ido aumentando tus experiencias, insumos de tu panadería de cuentos ^^

    Saludos!

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    1. yo tambien jugue Ocarina en emulador! por suerte a mi no se me rayo asi que pude terminarlo.
      gracias por tus palabras, munani. saludos

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  7. ...Maximus! al toque mi hiciste recordar a Martín Romaña y Octavia de Cádiz (Octavia lo rebautizó como Maximus).

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    1. buena! tienes toda la razon, oscar. se me paso ese dato. saludos :)

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